Si hay crisis…no se nota

Por Matías Enríquez

Damas y caballeros: que comience el show. Es hora de olvidar el campeonato mundial. Pasó tan rápido que ni tiempo tuvimos de saborear el gol de Palermo a Alemania o el debut del Chino Garcé. No hubo tiempo para nada. Ya nadie se acuerda de que España salió campeón. Grondona, Bilardo y Maradona son tres mosqueteros, amigos íntimos en un circulo de confianza al que nadie puede acceder, salvo Ruggeri. Los secretos están bien guardados y la casa está en orden.

Nuestros ojos futboleros ya no quedarán lastimados por el paupérrimo nivel del Mundial de Sudáfrica y, por suerte, comienza el torneo más apasionante del mundo. Los equipos inician sus temporadas bajo un clima primaveral. El gran desarrollo económico de nuestro país permite que la AFA suba el precio de las entradas (para los desprevenidos que no sabian: a partir de ahora la popular cuesta $50). Y eso que estamos de oferta ¿Cincuenta pesos para ver a los mundialistas Pozo y Garcé? Los hinchas de Colon deberían pagar un excedente. Pero ¿quién se va a quejar? Sí ya se sabe, como dice Don Julio…«todo pasa«.

Se cumplirá un aniversario del Fútbol para Todos que, con calidad técnica de primer nivel y brillantes relatores, nos permitirá ver al Boca de Borghi o el River de Cappa. Jorge Ameal sonrie con la incorporación de todo lo que pidió Bichi Borghi y estructura un equipo prácticamente nuevo con Lucchetti; Caruzzo, Insaurralde, Cellay; Fierro, Medel, Battaglia, Clemente o Escudero; Riquelme (ojo con Cañete); Viatri y Palermo. Y decían que Boca tenia deudas, pero por favor! Passarella no necesitó de grupos inversores para traer a Pavone, Arano, Carrizo, Maidana, Caruso, Acevedo y cia. Los clubes grandes estan en el Olimpo económico con sus deudas al día. Algo que también se da en el fútbol español, al mejor estilo Real Madrid y Barcelona. El nivel es parecido ¿o no?.

A los irregulares Racing e Independiente las arcas le sonrien. Molina y Comparada han hecho un trabajo ejemplar. Al igual que Argentinos Juniors, que ve tan asegurado el bicampeonato que se dio el gusto de dejar ir a Caruzzo, Calderon y Borghi (fundamentales en la conquista del Clausura). All Boys no anda con rodeos: quiere el título mientras despilfarra el dinero contratando más de quince futbolistas. Velez y Estudiantes tratarán de arreglar sus finanzas y jugar un mejor fútbol. Gareca y Sabella tendrán que trabajar un poquito mejor. Con partidos como Arsenal-Lanús, Quilmes-Colón y Banfield-Olimpo, la primer fecha ofrece fútbol de alto vuelo.

Con una economía en crecimiento, era hora de derrochar el dinero en pos de la mejoría del nivel. Es una fórmula comprobada científicamente: mayor movimiento del mercado de pases = optimización del estelar nivel de juego. Culminada la ironía, el fútbol argentino se ha vuelto más competitivo que vistoso. Cualquiera le puede ganar a cualquiera y eso favorece que las personas consuman el producto, así el precio aumente. El nivel de juego todavía deja mucho que desear pero nadie pone en tela de juicio la paridad en el certamen. Esperemos que en este Apertura los equipos se dediquen más a jugar y que sea un certamen a la altura de lo que pide la gente. Un simple pedido de cordura entre tanta locura futbolística.

Papelón en la AFA

Por Matías Enríquez

Otros tiempos. Bilardo, Maradona y Grondona, amigos

Hacía tiempo que la figura de Grondona no se veía de este modo. O eso es lo que parecía. En un comienzo todos pensaban que Maradona iba a brindar algo más que frases picantes. A priori, muchos palpitaban que se dispararía contra la AFA, su presidente, el Consejo Ejecutivo y demás individuos que hacen al gobierno del fútbol en nuestro país. Bajo su condición de ídolo insuperable, él sabía que tenia en sus palabras la posibilidad de dar un golpe certero a la arquitéctonica figura de Julio Grondona. Antítesis de aquella versión futbolística de México 86, Diego falló.

Su discurso de ayer estuvo plagado de frases que dolieron pero que con el correr de los dias quedarán en el olvido. Para darse una idea de la real magnitud de las mismas, impactó más la alteración de sílabas «tocuen» (furor como TT en la red social Twitter) que sus punzantes y filosas «Grondona me mintió y Bilardo me traicionó» o «la traición esta a la vuelta de la esquina». En estado de luto profesional, esperar que arremetiera contra los periodistas parecía un absurdo, aunque con Diego todo es posible. La metodología de monologar el discurso resultó una auténtica sorpresa para todos. No se dejen engañar: ese no es un Maradona en estado puro, adicto a la confrontación directa con los periodistas, situación en la que más cómodo se siente.

Es culpable por su silencio pre-mundial tras su denuncia acerca de que Grondona y Bilardo le armaban la lista. Denunciar despues del 0-4 contra Alemania tamaño testimonio no habla bien de él. Demonizó a Bilardo sin titubeos. Ese mismo Bilardo, al que trató de «traicionero», es con el que se había dado un abrazo paternal en aquella noche de Noviembre en Montevideo. Sorprendió su inocencia a la hora de hablar de Grondona. Se nota que el cambio «desde afuera» que se propone para sacar a Don Julio de escena no es deseado «desde adentro» del edificio de la calle Viamonte. Actuales dirigentes deportivos: Uds. también son grandes responsables.

Con una inquebrantable cintura, lejos estuvo Grondona de quedar mal parado. Dejó entre líneas que lo que dijo en el vestuario («estoy orgulloso del trabajo realizado») fue más un consuelo que una frase que diera pie a una potencial renovación. Su postura para ponerse en contra del ídolo más grande de la historia del fútbol argentino le quitó popularidad en el hincha común, pero volvió a imponer ese miedo en la AFA. Cual emperador romano, sí le pudo bajar el pulgar a Maradona, Grondona ya puede hacer lo que quiere.

El testimonio de Diego no dejó más tela para cortar. En la atmósfera circulan versiones acerca de que su destino sería México o Venezuela. Tal vez sea Chávez el que le pueda dar un trato estelar a la figura de Maradona. Mientras Bilardo se mantiene en la AFA porque «todavia tiene contrato hasta 2011» (Don Julio dixit) y el polémico Toti Pasman saca un libro titulado «La tenés adentro», Julio Grondona sigue siendo el hombre invencible en la AFA, una vez más.

Maradona, grandeza ante la derrota

Por Matías Enríquez

Irascible y polémico, Diego Maradona ya le habia dado tela para cortar a todos los medios de prensa en esa fantástica noche de Montevideo. «La tenes adentro» y «que la sigan …» forman parte de un discurso extrovertido y, quieráse o no, inolvidable por parte del verborrágico Diego.

En las vísperas a este mundial, todos nos subimos a ese típico carruaje exitista argentino premundialista. Este fenómeno se repite cada cuatro años en nuestro país, futbolero por naturaleza. Todos fuimos partes de este periplo que abordó el «casi fracaso» y que culmina con este cierre con gusto a poco y nada. Bajo estos términos hablar de fracaso resulta agraviante. Muchos presagiaban que ante una presunta eliminación, Maradona sería exultante y, tal vez, iracundo a la hora de aceptar una derrota. Nada de eso ocurrió.

Consumados los 90 minutos del partido con Alemania, Maradona regaló a los argentinos una gran cuota de dignidad y aceptación ante la derrota. Incluso frente a aquellos periodistas quienes aprovecharán la derrota y los conflictos para aumentar el número de sus tiradas. Tal como lo hizo ese colega platense que, con ciertos ánimos de generar conflicto, le preguntó a Maradona acerca de sí creía que algún argentino estaría contento con esta eliminación.

Categórico e invulnerable, Diego tuvo un comportamiento ejemplar luego del partido. Saludó a sus jugadores, a aquellos a los que defendió a capa y espada. Bien vale el reconocimiento para ellos. Vibrante y sanguíneo como es, fue y será, regaló un abrazo eterno con sus hijas y, sabido es, contuvo las lágrimas para demostrar cierta cuota de valentía, liderazgo y coraje frente a sus dirigidos.

Equivocó el planteo contra Alemania, claro que si, pero no es objeto de estas palabras criticar áspectos que hacen a la técnica pura de este deporte. Ya habrán miles de periodistas que se colocarán el traje de entrenador, en los diversos medios y defenestraran cada uno de los aspectos negativos del planteo de Maradona.

A diferencia de otras tardes, Diego mostró grandeza frente a la derrota. No se justificó con gestos obscenos ni con insultos verbales hacia los rivales. Luego del segundo gol, ya sabía que el resultado iba a ser irremontable. Ese abrazo escondido detrás de Kun Agüero previo a su ingreso da fe de ello. Su leyenda hubiera crecido aún más, si obtenía este mundial. Con su irrefutable comportamiento demostró que también se puede ser gigante en la derrota. Argentina podrá quedar afuera pero la grandeza demostrada por los jugadores y el entrenador, luego del partido, han acallado las críticas previas por parte de los alemanes. Será hora de decirle adiós a la maravillosa Sudáfrica y su espectacular organización. Este grupo de excelentes jugadores tendrá su revancha en Brasil 2014, pero esa será otra historia.

Listos los 23, ahora…que la historia se repita

Por Matías Enríquez

Por fin se puso fín a tanta ¿incertidumbre? Desde que comenzó su periplo como entrenador del seleccionado, Maradona siempre se caracterizó por su impredecibilidad. Agregando y quitando jugadores a su voluntad, en algunos casos excesiva, Diego fue dando sorpresas desde aquel amistoso contra Escocia, el día que empezó su ciclo como entrenador.

El entrenador, en labor conjunta a su cuerpo técnico y Julio Grondona, decidieron dar a conocer los 23 nombres que representarán a Argentina en el próximo mundial. A priori lo que se puede apreciar es una clara descompensación en la lista, dado el esquema que el entrenador ha decidido que iba a llevar a cabo en el continente africano.

Con el 4-4-1-1 que pregona Maradona, resulta un tanto absurdo la inclusión de 6 delanteros para tan solo 2 puestos. Tan paradójico como que hayan 3 volantes (y no 4) como reemplazantes a los titulares. A pesar de eso, Maradona mantuvo la sensatez en cuanto a los arqueros (ya definidos hace rato son: Romero, Andujar y Pozo) y los defensores, en donde la inclusión de Clemente Rodriguez -el único lateral puro del equipo- y Chino Garcé merecen ser advertidas. Chino deberá incurrir en la ilegalidad de la venta de entradas ya que Maradona decidió que pase de turista a actor principal. De carácter polinfuncional, el defensor ex-River pasará a ser un actor principal de la próxima cita mundialista.

En el medio, habrá que prender velas para que el físico de Verón resista toda la competencia. No obstante, Maradona designó sorpresivamente a Javier Pastore (y no al Principito Sosa) para un presunto recambio de la Brujita. La inclusión de Bolatti otorga otro perfil más ofensivo al puesto de volante central, en donde Javier Mascherano -capitan- es amo y dueño. Di María, Jonas y Maxi Rodriguez completan la nómina del mediocampo.

Arriba, el problema lo plantean los nombres. De frenéticas temporadas, Messi, Higuain, Diego Milito y Tevez (en menor medida) no podían quedar afuera. Lo de Agüero no corresponde a una condición familiar y la inclusión de Palermo responde más a su milagrosa condición de salvador que a un mero planteo racional. Sin esto, difícilmente se pueda explicar que el «optimista del gol» pueda disputar, por primera vez en su carrera, un mundial de fútbol. Como bien se habia dicho en reiteradas ocasiones (https://argensport.wordpress.com/2009/10/16/ese-es-martin-palermo/), desde su gol a Perú, Palermo ya había sacado pasaje para Sudáfrica.

Poniendole un punto final a las polémicas, es hora de bancar a estos jugadores. Compartiendo o no las decisiones del entrenador, habrá que dejar la subjetividad de lado y apoyar a Maradona para que, el 11 de Julio, podamos celebrar un título que se nos dio por última vez hace 24 años. Aquella vez, también había sido Diego el que nos llevo a la gloria. Esperemos que la historia se repita.

La Lista de los 23:

Arqueros (3):

Sergio Romero (Az Alkmaar – Holanda)

Mariano Andújar (Catania – Italia)

Diego Pozo (Colon – Argentina)

Defensores (7):

Martín Demichelis (Bayern Munich – Alemania)

Walter Samuel (Inter – Italia)

Nicolás Otamendi (Velez – Argentina)

Gabriel Heinze (Olympique Marsella – Francia)

Nicolás Burdisso (Roma – Italia)

Clemente Rodriguez (Estudiantes – Argentina)

Ariel Garcé (Colon – Argentina)

Volantes (7):

Javier Mascherano (Liverpool – Inglaterra)

Angel Dí María (Benfica – Portugal)

Jonás Gutierrez (Newcastle – Inglaterra)

Juan Sebastián Verón (Estudiantes – Argentina)

Maximiliano Rodriguez (Liverpool – Inglaterra)

Mario Bolatti (Fiorentina – Italia)

Javier Pastore (Palermo – Italia)

Delanteros (6):

Lionel Messi (Barcelona – España)

Gonzalo Higuaín (Real Madrid – España)

Diego Milito (Inter – Italia)

Sergio Agüero (Atlético de Madrid – España)

Carlos Tevez (Manchester City – Inglaterra)

Martín Palermo (Boca Jrs – Argentina)

Ortega y el último suspiro albiceleste

Por Matías Enríquez

Retrato. Esa postura única del Burrito

«Vestir esa camiseta representó lo máximo a lo largo de mi carrera». Las palabras, empapadas en una sanguínea declaración, pertenecen a Ariel Ortega. La alusión es a la camiseta celeste y blanca que, por decisión de Diego Maradona, Ortega volverá a vestir en el próximo amistoso del seleccionado frente a Haití. ¿Cuales son los motivos que llevan a Maradona a convocar a Ariel Ortega en este desdibujado presente del jujeño?

En su interior, Ortega suponía que aquel amistoso de Febrero de 2003, frente a Holanda iba a ser el último. En aquella tarde de Amsterdam, el equipo argentino cayó 1 a 0 (gol de Gio Van Bronckhorst) en el primer amistoso post-fracaso 2002. El Burrito tuvo una muy mala actuación jugando demasiado individualista para el esquema pseudo explosivo-colectivo de Marcelo Bielsa. Ya había sido uno más del montón que habia derrumbado el sueño nacional en tierras asiáticas.

Ortega debutó en la selección en 1993 frente a Alemania, en Miami. Basile era el técnico de aquella selección que reunía a los de la «vieja escuela», Maradona, Caniggia y Batistuta con los novatos como Ortega, Crespo y cia. Con tres participaciones en mundiales (Estados Unidos 94, Francia 98 y Corea-Japón 02), Burrito fue el heredero de la camiseta numero 10, una vez que Maradona se retiró del equipo nacional. A pesar de ello, Ortega sabe que, en la actualidad, esa 10 tiene un dueño que supera a su antecesor. Desde 2008, en el momento que asumió, Maradona dijo que sí Ortega retomaba su nivel de antaño sería indiscutido en su equipo.

Hoy, casi 2 años despues de aquella declaración, Maradona le da una nueva chance al último de los grandes magos del fútbol de potrero. Maradona cita al jujeño para impulsar el último tramo de su carrera profesional, azotada constantemente por recaídas de su enfermedad. En un gesto más paternal que real-racional, Diego llama una vez más al brillante Burrito para darle su última chance vestido de celeste y blanco, su gran amor.

Informe: Messi, la selección y el eterno debate

Por Matias Enríquez

Feliz en Barca ¿Decepción argentina?

En Barcelona riega el cesped con su fútbol de perfección en estado puro. En Argentina brilla por su ausencia. En el Nou Camp apila rivales como conos de entrenamiento. En el Monumental no puede eludir a dos sin perder la pelota. Lionel Messi es el mejor jugador del mundo por los pergaminos que brinda cada día jugando para el Barcelona. En unos meses, deberá revalidar su cartel de estrella en el Mundial. El relativista debate divide las aguas por donde se lo analice. ¿Porque Messi es el mejor del mundo con el Barcelona? ¿Porque no repite esas actuaciones con el equipo nacional? Aquí trataremos de dar alguna respuesta a este debate nacional.

Maradona y Guardiola, dos estilos contrapuestos

Escuchar a Messi preferir a uno u otro entrenador en esta disyuntiva sería noticia de los diarios de todo el mundo. Jamás dira que prefiere más a Guardiola por todo lo que significa Maradona para el fútbol argentino y por las represalias a las que se vería sometido por los simpatizantes argentinos. No obstante, da la sensación de que se quedaría con el catalán.
Desde que asumió, Guardiola se empecinó en destacar que Messi sería el abanderado de su equipo, tal como lo fuera Ronaldinho en el equipo de Rijkaard. Sin sobrecargarlo de presión, Guardiola ejerció un rol patriarcal sobre Messi. Protegiéndolo ante la prensa, Pep se encargó de darle a Messi un trato preferencial, acorde a los rendimientos del rosarino. En cambio, Maradona optó por otro camino. Con frases descabelladas y con comparaciones constantes a su figura, Diego presionó a Messi más de lo debido. Su deseo de que Lionel sea su heredero contrasta con las fisuras que el propio Maradona originó en el crack de Barcelona.

De Xavi, Iniesta y Busquets a Mascherano, Jonás y Verón.

Si Messi jugáse al tenis tan bien como lo hace al fútbol, seguramente pertenecería al eje Federer-Nadal-Murray. A diferencia del tenis, el fútbol es un deporte colectivo. Sin una buena estructura de juego, elaborada por sus compañeros, jamás se podria destacar. En Barcelona, Guardiola rodea a Messi de jugadores de buen pie que se sacrifican en la marca con cierta parsimonia. Con Xavi, Iniesta y Busquets, Guardiola no resigna la labor defensiva pero potencia, por las características de estos jugadores, la parte ofensiva. El principal destino en ofensiva de los pases de estos tres jugadores siempre es Messi. La dinámica del estilo frenético del equipo de Pep en ataque así lo solicita.
En Argentina, Mascherano y Jonas cumplen labores más defensivas que ofensivas. Por su estilo de juego alla italiana, Argentina no se puede dar el lujo de que ambos jueguen más de lo que marquen. El conservador estilo de Diego sólo deja para la creación a Verón, el único que asiste a Messi. Es muy extraño que Messi, salvo que se tire 15 metros hacia atrás, reciba asistencias directas de Masche o Jonás.

Esquema táctico: ¿4-3-3 o 4-4-2?

En este apartado siento que Messi sería el mismo en Barcelona y en la Selección, si esta última estuviera dirigida por Marcelo Bielsa. Con igualdad de nombres pero cambiando a Piojo López por este Messi, difícilmente Argentina hubiera quedado afuera en primera ronda de Corea-Japon 2002.
En cuanto a la numeración, en Barcelona se juega un 4-3-3 que no debería ser tan indiferente al 4-4-2 que ofrece la selección. La paradoja sucede cuando se pasa de los numeros a los hechos y/o nombres.
En la defensa se observan más precisiones acerca de esto. De los cuatro defensores que ofrece Guardiola, 2 son laterales con vocaciones netamente ofensivas como Dani Alves y Maxwell (jugadores que se desempeñaron en Sevilla e Inter, como volantes laterales). En la Selección, Maradona prefiere a dos laterales más bien defensivos como Burdisso, Otamendi o Heinze (tres jugadores que frecuentan ser marcadores centrales).
Las variables del mediocampo estan mas ligadas a los nombres y fueron expuestas en el apartado anterior.
En el ataque, las diferencias entre uno y otro equipo son irreconciliables. En Barcelona, Ibrahimovic y Henry (o Pedro) succionan marcas que liberan a Messi de forma directa. El argentino queda mano a mano con un lateral, a quién si logra superar, por condiciones propias y velocidad, quedará de frente a un central (que soltaría a su marca) o frente al arquero. En la Selección, Higuaín absorbe dos marcas como mucho, mientras que a Messi le quedan siempre dos marcas fijas (central y lateral), más la colaboración de un volante.

Mimado en Catalunya y criticado en Argentina, el esquema no lo favorece bajo ninguna perspectiva. Por eso, como dejamos en claro en una nota anterior, Messi debe reinventarse como jugador si quiere ser en la selección el mismo que es, día a día, en el Barcelona.

Los goles del Barcelona 4 – 0 Stuttgart, por los octavos de final de la UEFA Champions League.

Catenaccio argentino

Por Matías Enríquez

La selección argentina logró obtener un triunfo sólido frente a Alemania en el Allianz Arena, de Munich. No cualquiera le gana a Alemania en sus tierras. No cualquiera. El 1 a 0 refleja la posición de Argentina frente a uno de los candidatos a ganar el Mundial. Mesura que todavía falta mucho para Sudáfrica pero empieza a llegar una brisa de aire fresco de cara a Junio.

Con un interesante primer tiempo, en un foro, una mujer manifesto una frase tan cierta como crítica. «Gordo, a quien tenes en el banco? A vos jamás se te pudo ocurrir armar una estrategia así». El descalificativo al físico de Maradona no es motivo de análisis, pero resulta raro que, dado lo visto en eliminatorias, al entrenador se le ocurra plantear una estrategia como la que planteó. El primer tiempo refleja la idea italiana de Argentina de jugar un fútbol distinto a lo que su historia pide. Quizás sea hora de cambiar.

Con mucho más catenaccio que fútbol, Argentina logró derrotar a Alemania con gol de Higuain. El equipo aprovecho el grotesco error defensivo de los teutones y sacó una mínima diferencia que pudo sostener a lo largo de todo el pétreo partido. Aprovechar los errores del rival: ese parece ser el primer axioma que Maradona les exije a sus muchachos. Lo hizo Bolatti en el calor uruguayo y lo volvió a hacer el Pipita en el frío alemán. La fórmula del éxito implica una falla ajena basada en una gran verdad: todos los equipos (incluso los mejores) cometen errores en los partidos. Solamente España es la antitésis de este modelo teórico con varios fundamentos multimediales.

El planteo de Argentina tuvo una combinación de astucia y audacia. Jonás Gutierrez hizo un mayor sacrificio que de costumbre para evitar las subidas de Lahm, pero le faltó llegar a posiciones ofensivas. El conmovedor despliegue de Mascherano dejó en claro que las críticas contra él siempre fueron desmedidas. Di María es un hombre fundamental en este esquema para acompañar a Messi e Higuaín. Pipita cumple pero queda muy solo arriba y Messi…¿Que pasa con Messi?  He aquí una respuesta.

Si Messi no rendía con el sistema de Basile y de Maradona, cuando puso tres delanteros, definitvamente este cambio de sistema no lo favorece. El conservador esquema de Maradona no ayuda a Messi, que deberá reinventarse si quiere ser crucial en Sudáfrica (algo que anhela quien escribe estas líneas). Si se luce, será producto de su talento innato y de sus innimaginables gambetas, porque el equipo ya no juega para Messi. El crack del Barca arranca varios metros más atrás que de costumbre y debe eludir a tres rivales para llegar a posición clara de gol. Demasiado difícil para el futbol técnico y rígido que reina en la actualidad. Ni el mismísimo Maradona hubiera podido con tamaña responsabilidad.

Con nuevos aires, el equipo argentino avanzó un casillero más en el deseo de encontrar un funcionamiento colectivo. La victoria frente a Alemania sirve como piso para lo que debe hacer Argentina de cara a Sudáfrica. Todo lo anterior (clasificación con el último suspiro incluida) solo debe ser exhibido a los jugadores acerca de lo que no hay que hacer. De aca a Sudafrica todavía queda mucho trabajo para que volvamos el 11 de Julio con la Copa, y no antes, con las manos vacias.

Clasificación y nada mas

Por Tomás Oliveto

Finalmente luego de tanto sufrir, la Selección Argentina, ayer por la noche consiguió el pasaje para el próximo Mundial. Si bien se logró la clasificación, el equipo de Maradona no tiene muchas cosas para festejar ya que sigue demostrando un bajísimo nivel futbolístico.

El último sábado el conjunto nacional se enfrentó al peor equipo de la Eliminatoria: Perú. Todo hacía suponer que ese sería un encuentro accesible para la Argentina, pero no fue así. A pesar de ir en ventaja gracias a un gol de Higuain, la selección le cedió el campo y el balón al conjunto peruano.  En el minuto 45, bajo una lluvia torrencial Perú logró empatar. Solo Palermo, tres minutos después, le dio la ventaja definitiva a la selección evitando una verdadera catástrofe deportiva.

Pero la verdadera final llegó el miércoles a la noche. Uruguay de un lado, Argentina del otro, en el mítico Centenario de Montevideo, en lo que se denominó “La Batalla del Rio de la Plata”. El conjunto nacional dependía de si mismo, con un empate tendría la chance de acceder al Mundial. Precisamente para eso jugó ayer la Argentina: para no perder. Con una línea de cuatro defensores conformada por centrales que nunca pasaron al ataque, y con un medio campo más preocupado por la lucha que por el juego, los delanteros Messi e Higuain quedaron muy aislados del resto del equipo. Los cambios que introdujo el seleccionar nacional no hacen más que ratificar que la Argentina jugó a no perder. En un partido que careció de situaciones de peligro, Argentina logró el único tanto a seis minutos del final del partido, luego de una definición exquisita de Bolatti, tras una pelota parada.

¿Y qué decir del nivel futbolístico de la Argentina? Lo más simple sería afirmar que la Argentina no jugó a nada. Messi casi no se involucró en el juego y el conjunto celeste y blanco casi no remató al arco charrúa. Por suerte que estuvo Verón dentro del campo de juego, que si bien no generó situaciones de peligro, fue el único jugador que trato bien la pelota y siempre se la entregó a un compañero.

Por eso, la Argentina clasificó al próximo Mundial de Sudáfrica y nada más. A tan solo 8 meses de la cita más importante del fútbol mundial, el conjunto deberá corregir muchos errores y trabajar de manera profesional para conseguir el máximo objetivo: la Copa del Mundo.

Diego y su desmesura verborrágica

Por Matías Enríquez

«Que la chupen» será una frase que recorrerá el mundo como la frase más peleadora y controvertida que haya dicho Diego Maradona. «La pelota no se mancha» ya no liderará el ranking. Seguramente saldrán remeras con la frase y una infinidad de personas las vestirán por el mero hecho de ser una frase que dijo Maradona y, por ende, resulta palabra santa.

"Blanco o negro: Gris nunca" dijo Diego

Tomar la frase en el contexto apenas finalizado el partido resulta apenas más comprensible. Con la vorágine del pasaje al Mundial a cuestas, la frase no hubiese resultado tan controvertida, más allá de seguir siendo un comentario desafortunado. Ahora bien, repetir esas mismas palabras en la conferencia de prensa resulta aborrecible. Maradona equivocó el rumbo en la conferencia de prensa. Su discurso debió postular la unión y el famoso «todos para adelante» de cara al Mundial. Tuvo la oportunidad de demostrar la misma grandeza que tuvo como jugador. Pero no fue asi. Lejano a aquellas épocas doradas en el Mundial de Mexico, Diego erró…y muy feo.

Debería tomar el ejemplo de Verón, un líder natural con todas las letras. Luego de jugar uno de los mejores partidos en la selección, Bruja fue autocrítico con el equipo y dejó en claro que en la AFA debe empezar a haber un cambio urgente. Hablando de Verón: ya no se aceptan silbidos. Limpió su falsa imagen de «traidor» del Mundial 2002, con un despliegue que no acepta criticas. Preciso, categórico, elegante y fundamental, Bruja aceptó, dentro de la cancha, el liderazgo que Maradona y Cia no pudieron mantener fuera de ella. El hombre de Estudiantes es la razón fundamental para que hoy hayan argentinos averiguando los precios de un paquete a Sudáfrica. Debajo de su figura, también estan los santos: San Martín (Palermo nos devolvió las ganas de gritar con fuerza un gol de Argentina) y San Mario (Bolatti fue el héroe impensado de la jornada y su gol nos aseguro el pase al Mundial).

Con su discurso, Maradona parece haber tomado una postura autodestructiva. Se enemista con los periodistas (N. de la R.: Hay periodistas buenos y malos, como en todos los ordenes de la vida. Incluso hay futbolistas buenos y malos). Equivoca su camino enemistándose con los periodistas que, desde su llegada a la selección, le concedieron algunos beneficios que jamás otorgaron a otro entrenador. ¿Que piensan que hubiese ocurrido si Basile, antes de disputar dos partidos decisivos, se fuera a un spa en Italia? Coco habria sido carne picada por todos ¿O que piensan que hubiera sido de la vida de Bielsa si se hubiese comido 6 goles en Bolivia, en una de las derrotas más dolorosas de la historia de la Selección? Lo habrían despedido o habria renunciado, en un evidente claro de honestidad y coraje. Hablando de Bielsa, ¡cuanto se te extraña por estos pagos Marcelo!

Ademas, ¿de que se jacta Maradona con su «que la chupen»? ¿Acaso no cae que Argentina ha clasificado al Mundial con el último respiro? ¿Acaso comprenderá que este equipo que no juega a nada, debe cambiar en demasía si quiere que en el próximo Mundial, no quedemos afuera como en el 2002? ¿Acaso tendrá idea del manoseo de futbolistas (jamás visto en la selección) que hizo durante su año como entrenador, sacando y poniendo jugadores sin encontrar nunca una base futbolística? Y la lista de los ¿Acaso?, seria infinita.

En condiciones normales, Maradona no debería seguir siendo el entrenador. El asunto es que «las condiciones normales» en el fútbol han quedado marginadas. Despues de su desmesura verborrágica, Grondona debe tomar cartas en el asunto sobre el fenómeno Maradona. Si fuera una persona con valores similares al del citado Bielsa, el presidente de la AFA debería estar rescindiendo el contrato de Maradona hoy mismo. En caso de no tomar medida alguna y seguir bajo esta postura cómplice, Don Julio podrá ser la próxima victima de un Diego que ha perdido los estribos.

Sin margen de error

Por Tomás Oliveto

El partido contra Paraguay entregó pruebas contundentes de lo mal que esta la selección Argentina. Muchos de los errores cometidos el sábado por la noche frente a Brasil, se volvieron a repetir. La culpa es compartida, acá nadie queda afuera, ni el técnico ni los jugadores.

El equipo de Diego Maradona, perdió cuatro de los últimos cinco partidos en la Eliminatoria rumbo a Sudáfrica 2010. Este conjunto definitivamente no tiene un patrón de juego definido, no sabe de qué manera atacar, y mucho menos cómo hacer para defender. El técnico de la selección Argentina formó en el último encuentro con la “Brujita” Veron como volante por derecha. Algo bastante raro, porque el actual capitán de Estudiantes, no está capacitado a realizar su juego por la banda, y mucho menos cuando está con ciertas molestias físicas.

Otro aspecto un tanto extraño fue la conformación del banco de suplentes. Con tres jugadores dentro de la cancha capacitados para jugar como volante central (Mascherano, Gago y Veron), Maradona incluyó dentro de los relevos a Bolatti y Braña dejando fuera del mismo a Salvio, el único volante ofensivo que estaba en condiciones de afrontar el partido. Como si fuera poco, para la segunda etapa, entró Lavezzi para hacer la tarea de volante izquierdo, obligándolo a retroceder hasta su propia área, cuando el jugador del Nápoli es delantero.

En cuanto al ataque, los últimos partidos la selección demostró lo que le cuesta convertir en el arco de enfrente. A pesar de contar con Agüero, Tevez y Messi (hablaremos de él más adelante), a la Argentina le cuesta marcar goles. Es por eso que no se comprende como los dos máximos goleadores argentinos no son parte ni del banco de suplentes. Diego Milito y Lisandro López acumulan 61 goles entre ambos en las últimas dos temporadas y  esto no es suficiente para que Maradona les dé una chance en un partido de las Eliminatorias.

Pero los culpables dentro del campo de juego son los jugadores. Frente a Paraguay, más allá del preocupante nivel futbolístico, se vio a un equipo perdido en la cancha, casi sin respuesta desde lo anímico.  Inquieta el nivel de Zanetti y Heinze en la defensa, y sin duda que este Mascherano no es el mismo de otras temporadas que nos tenía acostumbrados a recuperar todos los balones en el medio campo. Pero Messi, sin duda que es el jugador con más deudas con la selección Argentina. Le exigimos a él, porque lo vemos brillar en el Barcelona y queremos que también nos maraville con la camiseta celeste y blanca. Pero al joven delantero también hay que ayudarlo. Sus compañeros cada vez que recibe la pelota se deben mover para crearle alternativas de pase y no esperar que Messi “los salve” con la jugada heroica. “El fútbol es un juego de equipo. Y que en función de cómo juega tu equipo, qué estilo tiene y la gente que lo compone, uno brilla más o menos. El problema de Argentina no es Messi. Su problema es su estilo”, señaló con mucho sentido el crack holandés Johan Cruyff.

Marcelo Bielsa recientemente afirmó: “El liderazgo se ve en la derrota y el conductor sólo es bueno si ha superado la adversidad. La adversidad es el momento de observación de las cosas”. Y ahí se encuentra Maradona, en el momento más crítico de la Selección Argentina. Ya no alcanza con la motivación, ahora veremos si Diego logra revertir la lamentable imagen del equipo y ser tan buen conductor como lo fue dentro del campo de juego.